Del código al diseño

Te voy a contar cómo en los últimos meses pasamos de esto:

A esto:

Para contártelo, hay que volver a marzo de este año.

Un cambio necesario

En mi primer día trabajando en Fintoc como Marketing Designer, me agendaron una reunión en la tarde que se llamaba “Fintoc Rebranding Review”.

Me habían contado que estaban en medio de un proceso de rebranding con una agencia gringa. Me explicaron que llevaban 4 años con un logo que ya no los representaba y que era difícil de trabajar. No tenían un brandbook definido, lo que hace muy difícil aplicar la marca en los lugares en donde tiene que estar.

Esta reunión era para que la agencia nos presentara sus primeras propuestas de logo. Mientras presentaban, me costaba ver el concepto por detrás, para mí solo eran “formas”. No encontraba que las propuestas tuvieran un argumento por detrás y no entendía por qué esos logos eran así, ¿de dónde salían?

Noté aproblemado a mi nuevo equipo. Sentía que las propuestas no les convencían y que les costaba ponerlo en palabras. Pensé: aquí hay un problema y tal vez puedo proponer algo tomando como referencia el briefing que le presentaron a la agencia. Yo podía ayudar.

Lo propuse y a la semana siguiente quedamos en que yo iba a liderar el rebranding de Fintoc.

Los logos no son solo formas

Un logo es más que dibujar trazos y formas. La idea detrás de un logo tiene que ser sólida, tiene que contar una historia coherente con la esencia y la historia de la marca.

Por eso la conceptualización es lo más entretenido y al mismo tiempo lo más difícil de hacer. Es crear un concepto que tiene que representar la marca: no puede ser ambiguo y no pueden haber cosas “flotando” fuera de la idea.

Me dediqué unos días a volver un paso atrás: conversar con los founders y leer mucho sobre Fintoc. Me ayudó mucho hacerle una pregunta a varias personas del equipo: “si tuvieras que definir Fintoc en una sola palabra, ¿cuál sería?”. Una de las palabras que más se repitió fue tecnología. Creo que este ejercicio fue clave para descifrar la complejidad de la marca en tan poco tiempo.

Con todo este input llegué a un concepto que sí conversaba con Fintoc y su esencia. La esencia de Fintoc es dev. Por eso elegimos el sistema binario.

De concepto a marca

Todo empieza en el binario: 0 y 1. El lenguaje más simple y la base de la computación. Queríamos un logo que representara esa simplicidad, como cuando alguien usa Fintoc para pagar en segundos. Nuestra identidad tenía que hablar de lo que hacemos: tomar lo complejo y hacerlo simple.

Bajando este concepto a la marca, lo siguiente fue crear el isotipo:

Isotipo: espacios llenos y vacíos

En el nuevo isotipo, los espacios vacíos representan los 0, y las formas representan lo lleno, el 1.

El espacio vacío (los 0s) también muestra nuestra búsqueda constante de simplicidad y transparencia. Eliminando lo innecesario, logramos un diseño claro y fácil de ver, para destacar lo esencial siempre.

Las líneas del isotipo no son una casualidad. Empiezan delgadas y crecen en grosor de manera secuencial. Esta progresión de menos a más muestra cómo los pagos son expansibles. Como Fintoc es capaz de procesar transacciones para todo tipo de negocios, de pequeños a enterprise.

Wordmark

Una de los principales requisitos de los founders era que teníamos que mantener la f minúscula. Para hacerlo bien, teníamos que elegir una tipografía que fuera muy fácil de leer y que se alejara de la f de Facebook.

Después de bucear miles de tipografías sans serif, llegamos a Chesna Grotesk. La f y la t tienen una curva en la que podíamos usar el mismo radio que tienen los 1s del isotipo.

Definiendo el stack de diseño

Para seguir desarrollando la marca, tocaba elegir una paleta de colores. La marca anterior no estaba pensada para llevarse a lo físico y los colores eran difíciles de imprimir, perdían fuerza. Ahora teníamos que hacer una marca que funcionara bien en ambos contextos: físico y digital.

Tomando en cuenta que la simplicidad era un principio clave, elegimos usar blanco y negro: 1s y 0s nuevamente. En un mundo saturado de marcas con muchos colores y comunicación, una marca así de binaria se destaca por contraste.

No todo es blanco y negro

Esta elección tenía un desafío. Queríamos que la marca se viera elegante, pero sólo con blanco y negro en todos lados corríamos el riesgo de vernos planos o sin mucha vida. Por esto, creamos una paleta de colores secundarios y un acento. El Azul Fintoc nos seguía gustando.

Para agregarle más profundidad, tomamos como base la paleta de colores, las formas y espacios del isotipo y creamos un sistema de gradientes:

Fuimos jugando con la misma idea de los grosores de menos a más, manteniendo todo dentro del universo Fintoc.

La última pieza del puzzle era poder representar fácilmente conceptos de los que hablamos recurrentemente, pero que son difíciles de graficar. Conversando con marketing, ventas, y producto, creamos una galería de más de 40 íconos de conceptos como conversión, margen y funnel.

Pasando a producción

Con los elementos claros, hemos estado trabajando en llenar cada uno de nuestros rincones con la marca nueva: presentaciones comerciales, reportes, página web, contenido, merch:

Ahora sentimos que tenemos una imagen acorde a nuestra esencia e historia. También nos da la flexibilidad para seguir creciendo, conectando mejor con los comercios y siendo más fácil de usar para los usuarios.

Con esta marca estamos listos para que 100 millones de personas usen Fintoc.

Si te gusta crear cosas simples y de calidad, probablemente te gustaría trabajar en Fintoc. Puedes revisar las vacantes abiertas acá.